El abuso infantil se refiere a cualquier tipo de maltrato físico, sexual, emocional o negligencia que afecte a un niño o niña. Este tipo de abuso puede suceder en cualquier hogar, sin importar su aspecto exterior o su situación económica, te compartimos el siguiente informativo dónde encontrarás mayor información.

¿Cómo se define el abuso infantil?

El abuso infantil se refiere a cualquier tipo de maltrato físico, sexual, emocional o negligencia que afecte a un niño o niña. Este tipo de abuso puede suceder en cualquier hogar, sin importar su aspecto exterior o su situación económica.

Señales físicas:

  • Moretones, heridas o quemaduras que se encuentran en diversas etapas de curación.
  • Ropa sucia o rasgada sin una razón aparente.
  • Dificultades para caminar o sentarse.
  • Infecciones que ocurren de manera recurrente.
  • Alteraciones repentinas en el apetito o en el peso.

Señales emocionales:

  • Alteraciones repentinas en el comportamiento, como volverse reservado, hostil o ansioso.
  • Dificultades para dormir o episodios recurrentes de pesadillas.
  • Disminución de la autoestima y problemas para mantener la concentración.
  • Temor desproporcionado hacia determinadas personas, lugares o circunstancias.

Señales comportamentales:

  • Evitar el contacto físico.
  • Mostrar una obediencia excesiva o ser muy reservado.
  • Exhibir conocimientos sexuales que no son apropiados para su edad.
  • Intentar hacerse daño a sí mismo.
  • Escapar de casa.

Es fundamental tener en cuenta que:

  • No todas las señales son evidentes: En ocasiones, los niños pueden encubrir el abuso debido al miedo o la vergüenza.
  • Los niños pueden sentirse responsables: Es habitual que los niños piensen que el abuso es culpa suya.
  • Las señales pueden diferir según la edad del niño: Los bebés y los niños pequeños pueden manifestar irritabilidad, dificultad para tranquilizarse o retrasos en su desarrollo.

Prevención del abuso infantil

La mejor forma de proteger a los niños es a través de la prevención del abuso. 

  • Educación: Conversa con tus hijos sobre su cuerpo y sus derechos. Enséñales a expresar "no" y a buscar ayuda si se sienten incómodos.
  • Fortalece los vínculos familiares: Dedica tiempo de calidad a tus hijos y crea un entorno seguro y amoroso.
  • Sé un modelo a seguir: Demuestra a tus hijos cómo tratar a los demás con respeto y dignidad.
  • Mantente alerta a las señales de riesgo: Observa cualquier cambio en el comportamiento de tu hijo o de las personas que interactúan con él.

Nota: si deseas recibir apoyo psicosocial u orientación sobre diferentes opciones de servicios en el país identificados en Cuéntanos, puedes escribirnos por WhatsApp, Facebook Messenger o Instagram, todos los días. 

Fuente:
UNICEF- Prevención de la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes.