En el siguiente informativo exploraremos la forma en la que la violencia basada en género puede impactar la salud física de las mujeres.

La violencia de género es una problemática grave que afecta a las mujeres de todas las edades y que tiene repercusiones a nivel psicológico y emocional, aunque también a nivel físico cuando la violencia se da a nivel corporal.

Efectos inmediatos

En el tema de la violencia física contra las mujeres, pueden generarse distintos tipos de lesiones inmediatas desde algo leve, hasta algo que necesite atención médica. 

  • Golpes o fracturas: hace referencia desde un hematoma, un corte, hasta una fractura de algún hueso o cualquier daño visible.
  • Heridas internas: se puede dar un daño en algún órgano interno y que no se evidencie de forma externa.
  • Problemas ginecológicos: las agresiones de índole sexual pueden provocar infecciones y algunas heridas o complicaciones a nivel ginecológico. 

Efectos a largo plazo

Las consecuencias físicas pueden tener una repercusión a largo plazo y puede que persistan tiempo después del incidente.

  • Dolores crónicos: usualmente se derivan de golpes demasiado fuertes y que pueden provocar una secuela.
  • Enfermedades cardiovasculares: cuando se está expuesto al estrés de la violencia constantemente, se pueden generar enfermedades del corazón, de la presión, entre otras.
  • Problemas gastrointestinales: una persona víctima de violencia, puede padecer de algún problema de úlceras, en los intestinos o algún problema digestivo.
  • Complicaciones durante el embarazo: si existe violencia durante el embarazo, aumenta el riesgo de tener un aborto espontáneo, un parto prematuro o problemas en el bebé al momento de nacer.

Impacto en la salud reproductiva

La violencia puede tener mayor impacto en la salud reproductiva de las mujeres si se presenta alguna agresión sexual. 

  • Embarazos no deseados: luego de una agresión, la víctima queda propensa a un embarazo no deseado, teniendo muchas repercusiones en su vida personal, en el bienestar físico y emocional.
  • Infecciones de Transmisión Sexual (ITS): se incrementa el riesgo de contraer alguna infección como el VIH.
  • Problemas menstruales: pueden existir alteraciones del ciclo menstrual, que pueden ir desde la irregularidad, hasta dolores severos.

¿Por qué es importante buscar ayuda?

Si eres o conoces una mujer que ha sufrido violencia, es vital que logres buscar apoyo, no solo emocional para intentar salir de esa situación, también apoyo en salud. Acceder a servicios de salud es importante para evitar daños en el cuerpo y su funcionamiento tanto a corto, como a largo plazo, así como para mejorar la calidad de vida. 

La violencia de género puede dejar cicatrices y daños en el cuerpo. Reconocer y abordar las consecuencias físicas de una situación de violencia es indispensable para la superación, el bienestar y para el mantenimiento de la integridad física individual. 

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Fuentes: 

Organización Mundial de la Salud: Comprender y abordar la violencia contra las mujeres: consecuencias para la salud 

Junta de Andalucía: Violencia de género: cómo afecta a la salud de las mujeres 

Oficina para la Salud de la Mujer: Efectos de la violencia contra la mujer